martes, 3 de enero de 2012

Reflexiones sobre el déficit

Ayer nos hacíamos algunas preguntas tras contemplar el concepto de déficit. En principio, de una manera bastante sencilla vamos a intentar contestar:

- ¿Por qué se endeudan los países? Deberían endeudarse para compensar una baja actividad económica, es decir como una política expansiva, para favorecer aspectos como el consumo y la inversión y así ayudar al crecimiento. En épocas de mayor actividad económica se deberían compensar estos déficits públicos.


- ¿Todos los países cumplen estos criterios de déficit? NO. Curiosamente Alemania y Francia hace relativamente pocos años no cumplían estos criterios de déficit y, de hecho, decían que no estaban dispuestos a cumplirlos ya que estaban pasando por una fase de ralentización de la economía y necesitaban impulsarla desde el Estado. Hoy en día Inglaterra se niega a cumplirlo, pero no está en el sistema euro y no hay problema, y aún así comunica que va a seguir aumentándolo para ayudar al crecimiento.

- Si hablamos de empresas, ¿también se endeudan? SIEMPRE. La forma básica de financiarse las empresas es a través del endeudamiento. De hecho, la mayor parte de la deuda en España proviene del endeudamiento privado y no tanto del público.

- Cuando las empresas se endeudan, ¿para qué lo hacen? Para obtener una mayor rentabilidad sobre los recursos invertidos. En general se endeudan para financiar su crecimiento. Es decir, en el caso de no endeudarse no podrían crecer tanto.

- ¿Es malo en todo caso el endeudamiento? NO. Y además podríamos formular otras cuestiones:

¿Por qué es malo el endeudamiento para los gobiernos y no para las empresas? No es cierto, lo que tiene que suceder es que el endeudamiento suponga un crecimiento y por lo tanto, la empresa sea capaz de devolver el dinero comprometido y además le debe salir rentable. De eso se deben ocupar los responsables de la empresa. Si son buenos gestores, lo rentabilizan; si no lo son, no pueden devolverlos.

En el caso de los Estados, debería pasar lo mismo. El endeudamiento debería servir para fomentar el crecimiento y crear las condiciones necesarias para que se pueda recuperar el país de la situación de crisis, recesión, ... (como queramos llamarlo). Si los que gobiernan son buenos gestores, lo rentabilizan; si no lo son, no pueden devolverlos.

¿Es comprensible que unos gestores renuncien a rentabilizar su empresa/estado/... porque renuncian a él mismo?¿No confían en la utilización de esos recursos por ellos mismos?¿Es comprensible que la solución sea menos empresa/Estado?¿Cuál es el coste de renunciar al endeudamiento? Volvemos al concepto del coste de oportunidad, que sigo comprometiéndome a definirlo próximamente.



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