¿Y si tu asistente de IA vende tus decisiones antes de que las tomes? La nueva “economía de la intención”
Imagina esta escena...
Comentas con tu asistente de inteligencia artificial que estás agotado, que llevas una semana dura de exámenes o de trabajo. Charláis un poco y, al rato, el asistente te dice:
“Has mencionado que estás muy cansado, ¿quieres que te reserve dos entradas para el cine y te pida una pizza en tu restaurante favorito?”
Cómodo, ¿verdad?
Ahora imagina que esa sugerencia no es
inocente: en segundo plano, varias empresas han pujado en
tiempo real para comprar esa información sobre tu estado de
ánimo y tus planes… y tu asistente simplemente ha “ganado la
subasta” con la oferta que más le interesaba a la
plataforma, no necesariamente a ti.
A eso es a lo que la Universidad de Cambridge empieza a llamar “economía de la intención”.
